La luz, elemento esencial en la fotografía (fotografía: escribir con luz) muchas veces queda de lado al dejarnos engañar por la anécdota, que nada importa, y la olvidamos, esa luz que da volumen y forma, que moldea y sugiere, o que puede destruir radicalmente una imagen. A veces incluso queda de lado en pos de la técnica utilizada, de la cámara, del lente, el tamaño de la copia, etc, etc. De qué nos sirve una buena cámara o lente si perdemos de vista el lenguaje mismo y nos entorpece la mirada, la introspección, nos aleja de la emoción.
Todas estas deben ser herramientas para poder canalizar mejor nuestro trabajo, para que nos facilite la tarea de comunicar, da lo mismo si un escritor escribe con computador o máquina de escribir, lo importante es lo que nos cuenta.
Ya estoy aburrida de escuchar que ha salido al mercado tal o cual cámara, que debemos estar en la punta de la ola, yo hace rato que me bajé de esa ola, no tiene sentido, hay que parar un momento, dejar de gastar en aparatos inútiles, encontrar tu manera de mirar, según eso escoger tu instrumento, y salir a disfrutar, el placer de ver la luz y atraparla en una fotografía que te represente, que sea consecuente contigo.